Grabadores al poder | Beca SEU

El proyecto busca estimular en los niños y jóvenes del Hogar de menores judicializados, Sierra Dorada, de San Marcos Sierras la producción de imágenes que fomenten la creación de un discurso artístico propio mediante la realización de grabado de matrices y objetos tridimensionales, estimulando el desarrollo de un oficio, la construcción de la autonomía de los jóvenes y su inserción social.

En los primeros encuentros se trabajó sobre la lógica del grabado a través del uso del sello, para que los niños y niñas comprendan la relación entre la matriz que armó cada uno (sello con goma eva) y la impresión sobre tela o papel.

Luego se trabajó con la xilografía, es decir, la talla sobre madera (con gubias) que luego se entinta y se imprime sobre el papel pasándolo por una prensa.

Finalmente, se realizó grabado en metal teniendo en cuenta la postura de los integrantes del proyecto que apunta a utilizar técnicas de grabado menos tóxicas que utilicen el sulfato de cobre en reemplazo del ácido nítrico.

De esta manera, los niños y niñas cubren con crayón un trozo de aluminio, realizan un dibujo sobre el mismo con un punzón, la matriz se sumerge en la solución de Sulfato de Cobre, luego se entinta y se la coloca en la prensa con el papel.

Galería de imagenes

Muestra final del proyecto

Jueves 21 de noviembre de 2019 | 19:00 | Pabellón Argentina (Ciudad Universitaria)
Con la presencia de los/as artistas realizadores/as de las obras y los coordinadores del proyecto

Título del Proyecto
Grabadores al poder: Arte, ciencia y Sierras

Unidad Académica
Facultad de Artes

Área temática
Comunicación, Arte y Cultura

Becarios/as
Andrés Bongiovanni y Nadine Madelón

Resumen
El proyecto propone unir el trabajo de investigación del equipo: “Técnicas químicas y electroquímicas para grabar y depositar metales, con métodos de baja toxicidad. Producción de objetos artísticos en dos y tres dimensiones. SECyT,2016/17” con la experiencia educativa de niños y jóvenes del Hogar de menores judicializados, Sierra Dorada, en San Marcos Sierras.
Una de las preocupaciones más importante por parte de los fundadores del hogar es la integración a la sociedad de los niños y jóvenes al momento de egresar. Lamentablemente suelen retornar a los entornos nocivos de los cuales provienen, careciendo de las herramientas necesarias para insertarse socialmente de manera autónoma. Dada la precariedad de la situación presupuestaria estatal el hogar se sostiene gracias a los voluntarios intermitentes y donaciones esporádicas. El personal del hogar, en general sobrecargado, se aboca a la urgencia del día a día quedando poco lugar para proyectos que apunten al desarrollo integral e interdisciplinar de los/as niños/as y jóvenes. Así nos proponemos trabajar con una dinámica de taller-laboratorio y el aprendizaje a través del juego y la experimentación, con estrategias participativas que tiendan a la valoración del conocimiento individual, colectivo e intersubjetivo.
Luego de un año desde el inicio del proyecto, quedará instalado en el hogar un taller de grabado para garantizar la continuidad del proyecto.