Estudiantes del “Monse” lanzaron con éxito su satélite en Conae

En Falda del Cañete, en los predios de la Comisión Nacional de Actividades Aeroespaciales (Conae), se vivió una verdadera fiesta. Tres chicas y dos chicos del Colegio Nacional de Monserrat pudieron lanzar con éxito a su pequeño satélite en un cohete que lo impulsó a unos 400 metros de altura. Fueron 40 segundos de descenso en paracaídas en los que se lograron obtener 15 datos. (28.09.2023)

El cohete dio un respingo y en pocos segundos alcanzó los 400 metros. A esa altura, el vector soltó al pequeño satélite del equipo “Novationes” del Colegio Nacional de Monserrat que inmediatamente desplegó su paracaídas y comenzó el descenso. Le tomó 40 segundos tocar tierra, tiempo suficiente para llevar a cabo 15 mediciones captadas por la estación terrena “Jack MiKe” a cargo de la misión “Dustbuster”.

Los nombres son de fantasía, pero la misión fue real.  Giuliana Lodolo, Josefina Quinteros Sarmiento, Ivo Tobías Maller, Agustín Godoy Giménez y María Agustina Bastos Villacé, estudiantes del “Monse”, integraron uno de los cinco equipos ganadores de la segunda edición de CANSAT Argentina, iniciativa que cada año propone a chicos y chicas de colegios secundarios de todo el país construir una carga útil cuyo tamaño no supere el de una lata de gaseosa y lanzarla en un cohete. La competencia fue organizada por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (MINCyT) y la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae).

En una mañana que alumbró ventosa este 28 de setiembre, el cohete que llevaba al satélite del “Monse” se elevó hacia el oeste, en dirección a Falda del Carmen. Cuando aterrizó, Giuliana, Josefina y María Agustina corrieron a buscarlo, mientras Ivo y Agustín permanecieron en la “estación terrena” evaluando los datos que les llegaba del aparato.

“Fue una experiencia increíble. Es un orgullo poder estar acá representando al colegio. Nuestro satélite mide la contaminación que producen las pastillas de freno de los autos. Son partículas muy pequeñas y muy dañinas. Trabajamos cuatro meses en este desarrollo y estamos muy contentos”, relató Giuliana.

“Con Agustín logramos capturar unos 15 datos en un tiempo estimado de 40 a 50 segundos que duró el descenso. Vamos a analizar ahora los resultados”, agregó Ivo.

“Nuestro satélite se fija en la calidad del aire, tiene sensores que monitorean el monóxido de carbono y partículas de 2,5 micras muy pequeñas, que si las respiramos afectan a los bronquios. También tiene una cámara que nos permite ver la cantidad de autos y relacionar ese número con el de las partículas de 2,5 micras y el monóxido de carbono”, aportó Agustín.

“Estuve encargada del paracaídas. Lo tiramos varias veces. En una ocasión de una grúa de 50 metros y otra desde el aeródromo Coronel Olmedo. Ahora pudimos lanzarlo desde 400 metros. Estoy muy orgullosa, nosotros no sabíamos nada de esto y ahora sabemos una ‘banda’”, dijo Josefina.

“Al principio, no me imaginaba llegar a esta etapa. La verdad es que estaba muy ansiosa. Pero por suerte todo salió como estaba planeado”, expresó Agustina.

Equipos

“Novationes”, del Colegio Monserrat, fue seleccionado entre los cinco ganadores de la competencia estudiantil CANSAT Argentina. Los estudiantes tuvieron a Matías Leuci como docente coordinador y a Enrique Philippeaux, un estudiante avanzado de la Universidad Tecnológica Nacional, como tutor asignado por Conae. Estos jóvenes construyeron un satélite del tamaño de una lata de gaseosa (de allí, el término CAN, lata, y SAT, satélite, por sus siglas en inglés).

Los chicos y chicas del “Monse” estuvieron acompañados en Conae por la vicerrectora de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), Mariela Marchisio, y por el rector del colegio, Aldo Guerra, entre otras autoridades del Monserrat.

También estuvieron presentes del director ejecutivo y técnico de Conae, Raúl Kulichevsky, el ministro de Ciencia y Tecnología de la Provincia, Pablo de Chiara, entre otras autoridades.

Los otros cuatro grupos de estudiantes seleccionados pertenecen a las provincias de Tucumán, Santa Fe, Entre Ríos y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, quienes también pudieron lanzar sus satélites.

“Estas acciones ayudan a que nuestros jóvenes puedan visualizar que las carreras tradicionales no son la única opción. Estamos agradecidos con la Conae, Cansat y el Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación porque esto nos viene muy bien a las instituciones educativas”, señaló Marchisio.

En la misma línea, Kulichevsky destacó: “La convocatoria se hizo pensando en un desarrollo con un objetivo: ayudar a solucionar una problemática de su lugar de origen. Fueron más de 600 proyectos, todos valiosos”.

Sobre CANSAT

CANSAT es una competencia internacional impulsada por varias agencias espaciales del mundo, entre las que se cuentan la Nasa (Estados Unidos) y la ESA (Europa). En línea con el Plan Nacional Espacial, que tiene entre sus prioridades realizar actividades de educación y formación, CANSAT Argentina se propone reproducir a escala el proceso por el cual se diseña, construye, prueba, lanza y opera un satélite.

En dos ediciones, esta competencia convocó más de 1.400 equipos de colegios secundarios de todo el país, totalizando 7.000 alumnas y alumnos, que recibieron capacitaciones por parte de especialistas, a fin de adquirir los conocimientos, las herramientas y los materiales necesarios para llevar adelante el desarrollo del proyecto.